QUINTOS DE MORA
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Montería memorable al combinarse todos los factores de preparación de meses, mancha con muchísima caza,día climatológico radiante, perfecta organización , trabajo excelente de los perros, extraordinario ambiente y finca emblemática.. |
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QUINTOS DE MORA
La segunda de las monterías de esta temporada de los Quintos de Mora dio un resultado sobresaliente al combinarse todos los factores a favor para su celebración; Una preparación de meses ejemplar dirigida por la guardería -encabezada por su guarda mayor José Polo-. Una organización perfecta, soltando las 26 rehalas a las 11:00 en punto en una mancha tan complicada como es esta solana de los Quintos. Un ambiente de lujo, por la calidad humana tanto del equipo como de los monteros que participan en este grupo. Un día perfecto para montear; fresco y sin nada de aire. Y un trabajo sublime de las rehalas que apenas dejaron un cochino o un venado sin desencamar.
Y todo esto unido que la montería se celebraba en una finca tan emblemática como son los Quintos de Mora con su carisma y sensación de caza auténtica que siempre transmite.
El resultado habla por sí solo. 65 venados, 46 jabalíes, más de medio centenar de hembras, unas cuantas medallas de las dos especies -y el resto de venados de una calidad media alta- nos dejaron con el mejor sabor de boca posible para despedir este año 2016. Sólo la gran distancia a que estaban situados los puestos -primando como siempre la seguridad- permitió a muchísimos venados y jabalíes salirse entre puesto y puesto habiendo evitado un resultado aún más sobresaliente.
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